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Boca revolucionó Ezeiza tras la heroica clasificación a la final de la Copa Libertadores: del detalle de Rojo a la ovación a Romero

Boca Juniors volvió a escribir un nuevo capítulo en su rica historia al clasificar a una nueva final de la Copa Libertadores luego de vencer por penales al Palmeiras en el Allianz Parque de Brasil tras una dramática definición.

Un gran número de simpatizantes del elenco Xeneize se acercó al Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini de Ezeiza para recibir al plantel comandado por Jorge Almirón para agradecer el pase a la definición del torneo, donde el 4 de noviembre enfrentará a Fluminense de Brasil en el mítico Estadio Maracaná.

Una de las primeras perlitas de la jornada fue Marcos Rojo, quien lució la camiseta de juego del uruguayo Miguel Merentiel, quien fue clave con una muy buena corrida para asistir a su compatriota en el tanto de Edinson Cavani.

Uno de los más buscados por los hinchas fue Sergio Romero, quien nuevamente fue vital por sus voladas en los 90 minutos y en la serie por penales. “Chiquito, Chiquito”, coreó el público al ver al arquero. “Tenemos un gran grupo de trabajo. Boca trata de hacer las cosas lo mejor posible. Hicimos las cosas bien y nos trajimos el triunfo, que es lo más importante”, manifestó el hombre surgido de la cantera de Racing.

El subcampeón del mundo en Brasil 2014 sostuvo que “las expectativas son grandísimas, están ahí arriba. Esperemos prepararnos de la mejor manera para el 4 de noviembre”, añadió. Además soltó las risas de los presentes al contar la anécdota de cuando dialogó con su esposa Eliana Guercio: “Mi señora lo primero que me dijo es que ganamos a lo Boca”.

También fue elogiado Edinson Cavani, autor del único tanto del Xeneize en el partido (luego malogró su penal en el inicio de la definición). “Estamos en la final y lo disfruto mucho. Todo el equipo estuvo bien”, comentó el experimentado atacante uruguayo.

El ex Manchester United y PSG en los últimos días decidió cambiar de look al afeitarse y anoche cortó su sequía goleadora. Al ser consultado al respecto, sonrió y soltó: “Hay gente que cree en eso”. “Vengo a entregarme al club y entregarme al máximo, a mis compañeros. Hay gente que te quiere o te quiere menos, pero no hay que pensar en eso”, añadió.

“Hay que disfrutar el momento y enfocarse en el campeonato ahora”, concluyó el charrúa, dejando en claro su ambición por ganar y dejar una huella con la remera azul y oro. El próximo desafío del Xeneize será el martes 10 de octubre, desde las 20, ante Belgrano en Córdoba. Luego de siete jornadas los de la Ribera acumulan 7 unidades, los que los posiciona en la undécima posición, a tres de Central Córdoba de Santiago del Estero, última institución en meterse dentro de la Fase Final.

“Se jugó una verdadera final anticipada y cayó de nuestro lado. Siento que hicimos una gran serie, siempre son difíciles estos partidos”, comentó Pol Fernández, quien lució la cinta de capitán tras la expulsión de Marcos Rojo y ejecutó el penal que metió a Boca Juniors en la gran final ante el Flu.

Tras aterrizar en el aeropuerto de Ezeiza, el plantel se subió a los micros para trasladarse al Boca Predio, donde se subieron a sus vehículos y marcharon rumbo a sus domicilios para descansar y recuperarse de cara al choque contra el Pirata por la fecha 8 de la Copa de la Liga.

infobae.com